Editorial #7
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LA SINUOSA RUTA DEL PATRIMONIO
El pasado martes 7 asistimos a una Jornada de Patrimonio Urbano en el Salón San Martín, convocada por el diputado Patricio Di Stefano, presidente de la Comisión de Patrimonio de la Legislatura.
Representantes de Basta de Demoler, Fundación Ciudad y otras ONG´s barriales (de Belgrano R, Barracas, La Boca, Floresta, Villa Pueyrredón, Agronomía y Bajo Belgrano) expusieron sus luchas, logros y penas frente un vasto público, los legisladores Epsztein, Sánchez y Di Stefano, y ante la sugestiva ausencia de Silvina Pedreira, presidente de la Comisión de Planeamiento Urbano
Esta participación ciudadana es, en si misma, una excelente noticia. Aunque Belgrano R lleva desde 1981 la delantera en la protección de su Patrimonio, la conciencia patrimonialista sigue creciendo sin pausa en otros barrios de nuestra Buenos Aires. Nuevos ciudadanos se suman -brindando su tiempo, a través de sus firmas- y permiten pensar en que alcanzar una masa crítica será posible.
Hasta aquí la buena noticia.
La mala es que el CAAP (Consejo Asesor en Asuntos Patrimoniales), aduana por donde pasan los pedidos de catalogación de edificios anteriores a 1941 (protegidos gracias a la ley 3056 aprobada hace poco), es un verdadero colador de nuestro Patrimonio Arquitectónico. Sí, “hecha la ley, hecha la trampa”.
Arguyendo motivos insostenibles está autorizando la demolición de edificios por motivos tales como la modificación de una fachada, el cambio de una puerta, o la vandalización (hechos suficientes para protegerlos), y que podrían llevar a una sistemática pseudo-vandalización de propiedades que quieran ser transformadas en terrenos por constructores inescrupulosos.
Para hacer frente a estas maniobras será clave el apoyo de la ciudadanía a las diversas acciones y proyectos de ley que irán surgiendo en los próximos meses.
Una de ellos, del diputado Horacio Piamonte (Coalición Cívica), propone la creación de un ente que apoye la conservación del Patrimonio a nivel nacional, con multas que duelan (las actuales son absurdamente bajas), y que den un marco para que la ley 3056 no se quede en buenas intenciones.
Las jornadas de “Salvemos Buenos Aires”, a realizarse el 15 y 16 de septiembre, con la participación de patrimonialistas de distintas ciudades del mundo, serán un hito importante para fortalecernos en la lucha por la conservación de nuestra arquitectura, historia e identidad.
Desde las páginas de FXBA lo seguiremos informando sobre este asunto, que tanto nos desvela.
